En la búsqueda del crecimiento personal, muchas veces apuntamos desde el inicio hacia metas elevadas, y perdemos de vista la práctica diaria como camino de crecimiento y cultivo continuado de la consciencia, que es aquello que verdaderamente nos permitirá fluir hacia ese estado de consciencia absoluta y universal. Por esto último, es tanto o más importante el proceso que la meta final: ser conscientes de todos y cada uno de los frutos de la práctica diaria y asidua, para hacer nuestro ese proceso de transformación constante y evolución consciente que dará paso a esa consciencia absoluta, a esa meta más elevada que nos hemos propuesto al comenzar.
Es cierto que al iniciar un proceso de cambio puede ayudarnos el plantearnos un objetivo que nos lleve a impulsar esa búsqueda para transitar ese camino, pero es fundamental que no perdamos de vista ni olvidemos el camino mismo, como verdadero vehículo del crecimiento.
Bhavana Yoga es el resultado de la consolidación de ese camino, de ese proceso, de esa búsqueda.
Bhavana es una palabra en pali, a veces traducida simplemente como “meditación”, cuyo significado literal es “desarrollar o cultivar”. Nosotros preferimos esta segunda traducción, ya que nos dice algo sobre cómo hemos de llevar a cabo nuestro proceso de cambio y crecimiento
Imagina que eres jardinero y cultivas tu jardín, o un pequeño huerto. Todos comprendemos que un jardín requiere cierto cuidado constante, y que si un día nos esforzamos en arreglarlo para olvidarlo después por un par de meses, no obtendremos muy buenos resultados. Tampoco es una buena idea que lo inundemos de agua para luego abandonarlo. Pero por sobre todo, no debemos olvidar de disfrutarlo a cada momento: “La Meta es el camino mismo”. El verdadero jardinero no sólo disfruta de su jardín cuando éste ya ha dado hermosas flores, o su huerto frutos. Un buen jardinero disfruta de “su jardín”, de aquello que hace a cada instante: cada gema, cada nuevo brote, cada hoja nueva, el proceso de preparar la tierra, todo ello forma parte del cultivar su jardín. No sólo importa el objetivo final, sino cada fase que conforma el camino.
Nuestra práctica tiene que ser equivalente a cultivar nuestro jardín. Es fundamental que el trabajo esté impulsado por una verdadera y elevada motivación, como es la consciencia universal, plena y absoluta. Pero es más importante aun no perder de vista los avances, progresos, y esos regalos que nos brinda el día a día en este camino de transformación constante, permitiendo que impregne cada aspecto de nuestra vida, para así poder alcanzar la verdadera evolución espiritual.
Por eso, en BHAVANA YOGA te invitamos a construir y profundizar tu práctica y a valorar y experimentar cada momento de este proceso con plena consciencia, brindándote un espacio donde desarrollar, disfrutar y compartir tu práctica. Para ello, te ofrecemos clases regulares, talleres, y seminarios. Además, te iremos proponiendo otras actividades que puedan ayudarte a complementar y enriquecer tu práctica. Queremos que BHAVANA YOGA sea tu espacio de crecimiento y desarrollo personal. El Yoga es nuestra filosofía de vida y queremos compartirlo contigo.
¡Te esperamos!